Desde el punto de vista jurídico, un diseño industrial constituye el aspecto ornamental o estético de un artículo.
Un diseño puede consistir en rasgos tridimensionales, como la forma de un artículo, o en rasgos bidimensionales, como motivos, líneas o colores
En principio, el titular de un diseño industrial registrado o de una patente de diseño está facultado a impedir que terceros fabriquen, vendan o importen artículos que ostenten o incorporen un dibujo o modelo que sea una copia, o fundamentalmente una copia, del dibujo o modelo protegido, cuando esos actos se realicen con fines comerciales.
Los diseños industriales se aplican a una amplia variedad de productos de la industria y la artesanía: desde envases y contenedores hasta mobiliario y enseres domésticos, equipos de iluminación y joyas, pasando por aparatos electrónicos y textiles. Los diseños industriales también pueden servir para símbolos gráficos e interfaces gráficas de usuario, así como logotipos.
En la mayoría de los países, un diseño industrial debe estar registrado para gozar de protección como “diseño registrado” en virtud de la legislación sobre diseños industriales. En algunos países, los diseños industriales están protegidos en virtud del Derecho de patentes como “patentes de diseño”.
La legislación sobre diseños industriales de algunos países concede a los “diseños industriales no registrados” –es decir, sin que sea necesario el registro- un tipo de protección limitada en el tiempo y el alcance.
En función de la legislación nacional de que se trate y del tipo de diseño, los diseños industriales pueden asimismo estar protegidos como obras de arte en virtud de la legislación sobre derecho de autor.
Los derechos sobre un diseño industrial se conceden por un período limitado. La duración de la protección de los diseños industriales varía de un país a otro, pero dura, como mínimo, 10 años. En muchos países, la duración total de la protección se divide en períodos sucesivos renovables.
Habitualmente, los derechos sobre un diseño industrial se hacen valer en un tribunal, por lo general por iniciativa del titular de los derechos, según disponga la legislación aplicable. Los recursos y sanciones varían de un país a otro y pueden ser de índole civil (mandamiento judicial para poner fin a una infracción, resarcimiento de daños y perjuicios, etcétera), penal o administrativa.
El derecho sobre un diseño industrial protege solo el aspecto o las características estéticas de un producto, mientras que una patente protege una invención que ofrece una nueva solución técnica a un problema. En principio, un derecho sobre un diseño industrial no protege las características técnicas o funcionales de un producto que, sin embargo, podrían quedar protegidas por una patente. Más información sobre las patentes.
En función de la legislación aplicable, los diseños industriales creados de forma independiente deben cumplir los dos requisitos siguientes, o tan solo uno de ellos: novedad y originalidad.
La evaluación de la novedad y la originalidad varía de un país a otro. Por lo general, se considera que un diseño industrial es nuevo si no ha sido divulgado previamente al público, y puede considerarse original si difiere significativamente de diseños conocidos o de combinaciones de características de diseños conocidos.
Por lo general, se encarga de registrar un diseño industrial o conceder una patente de diseño la oficina de propiedad intelectual del país (la región) en la que se presenta la solicitud. Puede consultarse una lista de las oficinas nacionales/regionales de propiedad intelectual.
En función de la legislación aplicable, una solicitud de registro de un diseño industrial o de concesión de una patente de diseño podrá presentarse personalmente o será preciso nombrar un agente.
Habida cuenta de que el costo de solicitar protección varía de un país a otro, convendrá contactar a la oficina de propiedad intelectual nacional (regional) para informarse acerca de la estructura de tasas. Si se desea solicitar protección en el exterior, además de las tasas corrientes de presentación de una solicitud, deberán tenerse en cuenta los costos de traducción y de contratación de un agente local.
Consultar la lista de oficinas nacionales/regionales de propiedad intelectual.
Los derechos sobre los diseños industriales son territoriales. Ello significa que esos derechos se limitan al país (o la región) en la que se concedió la protección.
Actualmente, no existe un derecho “mundial” o “internacional” sobre los diseños industriales..
Por lo general, para obtener protección en otros países, debe presentarse una solicitud de registro de diseño industrial o de concesión de una patente de diseño industrial en cada uno de los países en los que se desea obtener la protección, de conformidad con la legislación del país de que se trate. Dicho de otra forma, si se desea obtener protección en los países A y B, deberá presentarse una solicitud ante la oficina de propiedad intelectual (P.I.) del país A y otra solicitud ante la oficina de P.I. del país B.
Para evitar la necesidad de presentar solicitudes en cada uno de los países en que se solicita la protección, el Sistema de La Haya de la OMPI ofrece una solución práctica para registrar hasta 100 diseños en un gran número de territorios –todo ello mediante la presentación de una única solicitud internacional. Más información sobre el Sistema de La Haya.
En determinadas regiones, también es posible obtener la protección de los diseños industriales en la región de que se trate, mediante la presentación de una solicitud ante una oficina regional de propiedad intelectual. Es el caso, por ejemplo, de la Organización Africana de la Propiedad Intelectual (OAPI), que registra los diseños industriales en los Estados parte del Arreglo de Bangui; la Organización Regional Africana de la Propiedad Intelectual (ARIPO), que registra los diseños industriales en los Estados parte en el Acuerdo de Lusaka; la Oficina de Propiedad Intelectual del Benelux (BOIP), que registra los diseños industriales en los tres países del “Benelux”; y la Oficina de Propiedad Intelectual de la Union Europea (EUIPO), que registra los diseños industriales en los Estados miembros de la Unión Europea.
Una solicitud de registro de un diseño industrial o de concesión de una patente de diseño industrial puede ser presentada en la oficina de propiedad intelectual (P.I.) del país (o la región) en la que se solicita la protección. Se recomienda consultar nuestra lista de oficinas de P.I. para encontrar la oficina de su interés.
Como alternativa, el Sistema de La Haya para el registro internacional de diseños industriales ofrece una solución práctica para registrar hasta 100 diseños en un gran número de países mediante la presentación de una única solicitud internacional. Más información sobre el Sistema de La Haya.
El momento en que se presenta la solicitud es muy importante. Teniendo en cuenta el requisito de novedad u originalidad que impone la mayoría de las legislaciones sobre diseños industriales, por lo general es fundamental presentar una solicitud de registro o de concesión de una patente antes de divulgar públicamente el diseño, a fin de evitar que se aniquile su novedad/originalidad.
Si el diseño industrial ya ha sido divulgado al público (por ejemplo, mediante un anuncio publicitario publicado en el sitio web de la empresa), es posible que ya no pueda ser considerado “nuevo” u “original” y que pase a formar parte del dominio público. Sin embargo, algunos países contemplan un “plazo de gracia” para presentar la solicitud después de la divulgación del diseño industrial. Ese plazo constituye una salvaguardia para los solicitantes que hayan divulgado su diseño industrial antes de presentar una solicitud, y suele ser de 6 o 12 meses.
Muchas oficinas de propiedad intelectual ponen a disposición en Internet bases de datos sobre los registros de diseños industriales o las patentes diseño industrial. Consulte nuestra lista de oficinas nacionales/regionales de propiedad intelectual.
WIPO Lex ofrece fácil acceso a la legislación sobre propiedad intelectual de muchos países y regiones, así como a los tratados sobre propiedad intelectual.
Asimismo, un gran número de oficinas nacionales o regionales de propiedad intelectual cuentan con sitios web en los que se suministra información sobre la legislación nacional o regional. Para más información, puede consultarse una lista de enlaces a las oficinas nacionales y regionales de propiedad intelectual.
Los diseños industriales hacen que un producto sea atractivo y llame la atención de los clientes. El diseño motiva la elección del consumidor: el aspecto de un producto puede ser un elemento clave en la decisión de compra. Dicho de otra forma, el éxito o el fracaso de un producto puede deberse, al menos parcialmente, a su aspecto. Por lo tanto, los diseños industriales pueden ser muy importantes, tanto para las pequeñas y medianas empresas (pymes) como para las empresas más grandes, sin importar su sector de actividad.
La protección de los diseños industriales debería formar parte de cualquier estrategia empresarial. Los motivos principales para proteger los diseños industriales son los siguientes:
Si no protege sus diseños industriales no gozará de derechos exclusivos sobre ellos, por lo cual los competidores podrían colocar en el mercado un producto que incorpore su diseño industrial sin tener que obtener su autorización.
Es decir, si un competidor u otra persona, sin su consentimiento, fabrican, venden o importan productos que ostenten o incorporen un diseño que sea una copia (o fundamentalmente una copia) de su diseño industrial, usted no tendrá medios jurídicos para hacer frente a esa situación. Además, es probable que las copias del dibujo o modelo industrial se vendan a un precio más bajo, puesto que los competidores no tienen que recuperar las inversiones realizadas en el proceso creativo. Ello podría reducir su cuota de mercado para el producto en cuestión y dañar la reputación de su empresa y de sus productos.
Si no ha encontrado respuesta a sus preguntas en esta página o en la página web sobre diseños industriales, no dude en ponerse en contacto con nosotros.
Advertencia: Las preguntas y respuestas suministradas en esta página tienen una finalidad meramente informativa y no constituyen una referencia jurídica. Tampoco representan la postura oficial de la OMPI ni la de sus Estados miembros.