21 de diciembre de 2022
Lorena Rivera Léon y Sacha Wunsch-Vincent, Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), y Don Brasher, Altan AE. Yurdakul y John W. Miller, Trade Data Monitor (TDM)
En 2022, el comercio global de alta tecnología aumentó a un ritmo menor que el comercio total de bienes y mercancías, según un análisis en el que se actualizan las conclusiones anteriores del Índice Mundial de Innovación de 2022, y que se basa en los datos de Trade Data Monitor.
Mientras que tanto el comercio de alta tecnología como el comercio mundial de mercancías experimentaron un crecimiento inusualmente alto en 2022 a medida que se recuperaban de los efectos de la pandemia de COVID-19, esta es la primera vez en este siglo que han divergido con tanta fuerza: el comercio de alta tecnología no ha crecido tan rápidamente como el comercio mundial de mercancías, lo que sugiere que el comercio mundial de alta tecnología se enfrenta a nuevos obstáculos.
El comercio mundial se recuperó totalmente de la pandemia de COVID-19 y aumentó un 24,1% hasta los 24,2 billones de dólares sobre una base anualizada frente a 19,5 billones de dólares, mientras que el comercio de bienes de alta tecnología aumentó un 16,5% hasta los 4,4 billones de dólares frente a 3,75 billones de dólares.
Como se muestra en la figura 1, durante el auge de la alta tecnología, el comercio de bienes de alta tecnología, que ha experimentado un auge en este siglo, siempre ha superado al comercio del total de productos hasta este año.
Las cadenas de suministro se diversifican. Los países y las empresas intentan abastecerse de mercancías lo más cerca posible de su lugar de origen. Al mismo tiempo, los continuos problemas geopolíticos han frenado el crecimiento del comercio mundial de alta tecnología.
Sin embargo, el desarrollo de nuevos sectores, sobre todo en la fabricación de energías renovables, baterías y vehículos eléctricos, ha contribuido a mitigar esa caída.
Los Estados Unidos han sido una de las principales economías, junto con Singapur, la República de Corea, los Países Bajos, Malasia, Francia y Viet Nam, en aumentar las exportaciones de alta tecnología, en un 7% interanual hasta alcanzar los 233.000 millones de dólares.
Sin embargo, la estructura de los flujos comerciales estadounidenses de alta tecnología está cambiando. En los 9 primeros meses de 2022, por ejemplo, las exportaciones estadounidenses de procesadores y circuitos integrados a China cayeron un 34,2%, hasta los 5.100 millones de dólares, mientras que los envíos de esos productos a México aumentaron un 11,8%, hasta los 6.900 millones de dólares.
El principal mercado de los Estados Unidos para el conjunto de las exportaciones de alta tecnología fue México, donde los envíos aumentaron un 16,5%, hasta los 36.700 millones de dólares.
Como contrapartida, en los 10 primeros meses de 2022, las exportaciones chinas de alta tecnología cayeron un 1,3%, pasando de 755.500 millones de dólares a 745.600 millones.
La principal razón fue el descenso de las exportaciones a países que forman parte de la amplia red china de cadenas manufactureras. Las exportaciones a Viet Nam disminuyeron un 11,7%, hasta 26.800 millones de dólares. Los envíos a México cayeron un 18%, hasta los 13.100 millones de dólares.
Como se observa en la figura 2, a pesar del descenso, China sigue dominando las exportaciones de alta tecnología.
En particular, China sigue liderando las exportaciones de teléfonos inteligentes, el bien de consumo estrella del sector, con 114.800 millones de dólares en 2022, su principal exportación de alta tecnología. Su segundo producto en importancia fueron las máquinas de procesamiento de datos. Otra nueva categoría importante, los paneles solares, tuvo un valor de 36.900 millones de dólares, lo que indica un fuerte impulso de las energías renovables.
El principal mercado de exportación de alta tecnología de China fueron los Estados Unidos, donde sus envíos aumentaron un 6,2% hasta alcanzar los 128.000 millones de dólares.
Están surgiendo nuevas cadenas de suministro panasiáticas más allá de los centros de producción chinos.
Como se muestra en la figura 3, cinco de los 10 principales exportadores de alta tecnología del mundo son ahora asiáticos.
Más allá de China, la República de Corea y el Japón, las exportaciones de alta tecnología se disparan en Malasia, Singapur, Tailandia y Viet Nam. Por ejemplo, las exportaciones de Malasia aumentaron un 32,1% hasta alcanzar los 102.300 millones de dólares.
El esfuerzo mundial por descarbonizar las economías, junto con los avances en la tecnología de las baterías, están impulsando el comercio mundial de vehículos eléctricos.
Alemania se perfila como el actor dominante en el mercado mundial de los vehículos eléctricos. Sus exportaciones aumentaron un 55,4% hasta alcanzar los 16.400 millones de dólares en los nueve primeros meses de 2022. China ocupa el segundo lugar, con un aumento de los envíos del 115,4%, hasta situarse en 11.800 millones de dólares. Las exportaciones de los Estados Unidos descendieron un 1,9%, hasta los 3.800 millones de dólares.
Ese auge en el comercio de vehículos eléctricos ha impulsado los envíos de materiales relacionados con la fabricación de las baterías necesarias para los vehículos eléctricos.
Las exportaciones de baterías de litio por parte del principal proveedor, China, aumentaron un 83,4% hasta alcanzar los 34.900 millones de dólares en los nueve primeros meses de 2022, frente a los 19.000 millones de dólares en el mismo periodo de 2021.
Como se ilustra en la figura 4, las exportaciones de vehículos eléctricos proliferan en todo el mundo.
El Índice Mundial de Innovación utiliza dos indicadores sobre el comercio de alta tecnología que se obtienen gracias a la colaboración con Trade Data Monitor y al acceso a la base de datos Comtrade de las Naciones Unidas; la Organización Mundial del Comercio y la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo. Trade Data Monitor se especializa en el suministro de datos comerciales para la investigación económica. Esta organización recopila, procesa y publica mensualmente los datos aduaneros de los gobiernos de todo el mundo.