Conozca a los ganadores del Concurso de fotografía de la OMPI para jóvenes de pueblos indígenas y comunidades locales 2021-2022
22 de abril de 2022
Los ganadores de la primera edición del Concurso de fotografía de la OMPI para jóvenes de pueblos indígenas y comunidades locales 2021-2022 son tres jóvenes fotógrafos del Brasil, Filipinas y Kenya.
El Concurso de fotografía de la OMPI, cuyo tema es Cambio climático y acción climática: la Madre Tierra a través de nuestros lentes, alienta a la juventud de los pueblos indígenas y las comunidades locales a expresar su opinión sobre el cambio climático y la acción climática, y la sensibiliza sobre cómo puede utilizarse el derecho de autor para proteger la creatividad expresada en las fotografías.
Los jóvenes son los más afectados por el futuro de nuestro planeta, y por ello me complace sobremanera que en la primera edición del Concurso se ofrezca a jóvenes miembros de comunidades indígenas y locales la oportunidad de pronunciarse, a través de la fotografía, sobre la crisis climática y otros desafíos conexos que les ocupan. Estos jóvenes creadores, cuyo trabajo está protegido por el derecho de autor, pueden aprovechar todo el potencial de la fotografía para expresar con claridad sus preocupaciones sobre el mundo y difundir las mejores prácticas de sus comunidades.
– Daren Tang, director general de la OMPI.
De los centenares de candidaturas recibidas, se seleccionaron 30 fotografías que pasaron a la fase final del concurso. Un jurado independiente formado por cuatro fotógrafos internacionales procedentes de comunidades indígenas y locales seleccionó a las tres personas ganadoras de los premios, que se concedieron durante un evento en la OMPI para conmemorar el Día Internacional de la Madre Tierra (22 de abril).
Tercer puesto: Verine Ogutu (luo) (Kenya)
Verine Ogutu, de 24 años, es una joven de la comunidad luo de Kenya. Es estudiante de comunicación y una entusiasta de la fotografía.
En la foto de Verine aparecen dos búfalos atrapados en el lodo acumulado en una balsa de agua que utilizaban como abrevadero. Como explica Verine, la reciente sequía acaecida en algunas zonas del norte de Kenya está afectando negativamente tanto a los animales salvajes como a los domésticos, que deben viajar cada vez más lejos en busca de sustento.
Sin embargo, la comunidad de Verine no se rinde. “Hemos aprendido a reconocer los patrones de lluvias y hemos empezado a cultivar plantas resistentes a las sequías, capaces de soportar las duras condiciones climáticas. Dichas plantas proporcionan forraje a los animales domésticos y también actúan como cobertura forestal. Además, plantamos árboles que atraen las lluvias”.
Verine espera que su foto ayude a personas de todo el mundo a comprender la importancia de la vida silvestre para su comunidad. “En todo el mundo, el cambio climático nos está afectando de un modo u otro. Haga todo lo que esté en su mano para proteger a la Madre Tierra, ya que es el único lugar que llamamos hogar”.
Al obtener el tercer puesto, Verine ha ganado un equipo fotográfico de su elección por un valor de hasta 1.500 dólares de los Estados Unidos.
Segundo puesto: Prince Loyd Besorio (subanon) (Filipinas)
Prince Loyd Besorio, de 22 años, es un joven líder del pueblo subanon de Filipinas. Es periodista, voluntario, fotoperiodista y creador de contenidos. Prince es un apasionado de los océanos y se describe a sí mismo como “un talasófilo, pero también como una sirena capaz de prosperar en la tierra”. A Prince y a su comunidad le preocupan la contaminación del agua y del océano que constatan cada día al vivir junto al mar. “Entiendo que primero debo resolver el problema a pequeña escala que vive mi comunidad antes de poder ayudar a resolver el problema medioambiental que sufre el mundo a gran escala, que es el de la irresponsabilidad y la apatía”.
En su fotografía se muestra una tradición de un grupo de la comunidad sama bajau en Filipinas, que consiste en crear objetos nuevos a partir de residuos humanos con el fin de preservar el medio ambiente. En la foto, una niña sama bajau corta en tiras basura de plástico reciclado para hacer un cojín decorativo. “Mi foto representa la empatía del grupo sama bajau para con el medio ambiente oceánico. Creen firmemente en los espíritus del mar, y también que, si se respeta al océano, este provee pesca en abundancia, en lo que se denomina padalleang”, explica.
En cuanto a los subanon, Prince dice que estos interpretan el cambio climático como el castigo enviado por Magbabaya (el Ser Supremo) por el fracaso de la comunidad a la hora de guardar debidamente los recursos naturales. Con todo, y pese a que la comunidad de Prince vive de manera tradicional y sin realizar grandes emisiones de carbono, la crisis climática le afecta negativamente al estar íntimamente ligada a la naturaleza.
Al obtener el segundo puesto, Prince ha ganado un equipo fotográfico de su elección por un valor de hasta 2.500 dólares de los Estados Unidos.
Primer puesto: Joanderson Gomes de Almeida, (pankararú) (Brasil)
Joanderson Gomes de Almeida, de 30 años, es un joven indígena pankararú del estado de Pernambuco (Brasil). Actualmente, Joanderson está realizando un curso de maestría en la Universidad de Brasilia.
El pueblo pankararú se caracteriza por su deseo ferviente de preservar la cultura y las tradiciones indígenas, dice Joanderson. Desgraciadamente, su comunidad se ve muy afectada por períodos de sequía, lo cual dificulta la realización de actividades agrícolas tradicionales.
Su fotografía, “Tirando de la vid”, muestra una tradición que forma parte del festival Corrida do Imbu. La tradición ayuda a predecir si el año siguiente será de buenas cosechas, abundancia y buenas lluvias, o si será un año de escasez. “En ese momento, los seres cosmológicos nos muestran el camino, nos dan orientaciones sobre cómo será el clima durante ese período”, explica Joanderson. La tradición también hace que todos los miembros de la comunidad reflexionen sobre lo que podría haberse hecho de forma diferente, y sobre cómo pueden mejorar su actitud hacia la Madre Naturaleza.
El mensaje de Joanderson para los innovadores de todo el mundo es que colaboren con los pueblos indígenas, ya que “la relación [de estos] con la naturaleza se basa en el respeto y no en variables mercantiles, pues toman el alimento que les provee la tierra de manera consciente y sostenible”.
En palabras de Joanderson, “todavía hay una solución para nuestro planeta”.
Al obtener el primer puesto, Joanderson ha ganado un equipo fotográfico de su elección por un valor de hasta 3.500 dólares de los Estados Unidos.
Menciones honoríficas del jurado
“Mi foto muestra un mangle que ha resistido la subida del nivel del mar”, dice Jovi Totorea, un joven salomonense de la comunidad de la aldea de Hauhui. “Los manglares tienen el potencial de mitigar la subida del nivel del mar causada por el cambio climático y de actuar como barrera biológica frente a los fuertes vientos para las comunidades que viven a baja altura. Por ello, la recuperación de los manglares es la mejor opción para mi comunidad local a la hora de mitigar los efectos del cambio climático”.
Mery Nube Utitiaj Nunink, una joven shuar del Ecuador, captó a dos niños jugando en el agua. Según Mery, ya sea por falta de sensibilización o sencillamente por no ser escuchada, la gente de su comunidad deja de luchar contra la realidad y opta por aceptar los cambios y adaptarse a ellos. “Ese es el significado de esta fotografía: la botella y el tubo son el problema; las sonrisas de los niños los muestran adaptándose y lidiando con paciencia y armonía con su situación”, explica.
Exposición de las fotografías en la sede de la OMPI
A partir de hoy, las treinta fotografías preseleccionadas se exponen en la sede de la OMPI en Ginebra (Suiza). La exposición fotográfica estará abierta a nuestro personal y a los invitados hasta el 6 de mayo de 2022.
El director general de la OMPI, Sr. Daren Tang, ha anunciado oficialmente los ganadores en la ceremonia de inauguración de la exposición que ha tenido lugar hoy.
Antecedentes
El Concurso de fotografía se puso en marcha el 12 de agosto de 2021, en el marco de la celebración del Día Internacional de la Juventud. Esta actividad se planificó en consulta con una junta asesora formada por representantes de pueblos indígenas y comunidades locales, incluidos jóvenes, y organizaciones, gobiernos y personas que trabajan en el ámbito del cambio climático, la biodiversidad, la fotografía, la propiedad intelectual, los medios de comunicación y las empresas.
Debido a su estrecha relación con el medio ambiente y sus recursos, y a su dependencia de ellos, las comunidades indígenas y locales son de las primeras en enfrentarse a las consecuencias directas del cambio climático, como el aumento de las sequías, la pérdida de diversidad biológica, la pobreza y el desplazamiento, el aumento de las temperaturas y la subida del nivel de los océanos, entre otras muchas. Al mismo tiempo, estas comunidades son las principales poseedoras de conocimientos tradicionales que pueden desempeñar un papel importante a la hora de evaluar el impacto del cambio climático y promover la adaptación a este. En los últimos años, el papel de los pueblos indígenas y las comunidades locales en la mitigación del impacto del cambio climático ha sido reconocido en diversos debates públicos a escala local, nacional e internacional.