Nace una nueva generación de narradores: conozca a los ganadores de la edición de 2023 del Premio de fotografía de la OMPI para jóvenes de Pueblos Indígenas y comunidades locales
2 de noviembre de 2023
Tres jóvenes y talentosos fotógrafos de Colombia, Guatemala y Nigeria son los distinguidos ganadores de la segunda edición del Premio de fotografía de la OMPI para jóvenes de Pueblos Indígenas y comunidades locales.
Bajo el lema Vestimos nuestra cultura para contar nuestras historias, la edición de 2023 del Premio de fotografía de la OMPI alentó a los jóvenes de los Pueblos Indígenas y de las comunidades locales a transmitir un mensaje importante sobre la vestimenta de sus comunidades y el significado que tiene para sus identidades, al tiempo que se les sensibilizaba sobre cómo puede usarse el derecho de autor para proteger la creatividad expresada en las fotografías.
Un distinguido jurado independiente, compuesto por tres fotógrafos de talento procedentes de Pueblos Indígenas y comunidades locales, asumió la difícil tarea de seleccionar a tres ganadoras entre las 15 fotografías preseleccionadas. Felicitamos a los jueces por haber llevado a cabo esta difícil tarea.
Y ahora, déjese inspirar por las singulares semblanzas de los ganadores y sus correspondientes fotografías, así como por los talentosos receptores de las menciones honoríficas de la presente edición.
Tercer puesto: Manuel Felipe García Larios, Guatemala.
Manuel es un maya poqomam de 28 años, del municipio de Palín, en Guatemala. Es periodista profesional y locutor en una emisora local, Radio Qawinaqel, que ofrece información y entretenimiento orientados a la comunidad en poqomam y en español, y comparte conocimientos sobre la cosmovisión maya poqomam. Es licenciado en Ciencias de la Comunicación por la Universidad de San Carlos de Guatemala.
Manuel es un apasionado de la fotografía documental y cuenta con más de seis años de experiencia en el estudio y la práctica de la fotografía. A través de sus fotografías, ha documentado las diferentes expresiones culturales y actividades comunitarias de su zona.
Al describir su fotografía, destacó lo siguiente: "Este autorretrato refleja el aguante de las nuevas generaciones al preservar y promover el conocimiento ancestral a través de la investidura de un Ahq'iij (guardián del calendario), que se encarga de la conexión entre los humanos y las deidades mayas. Las generaciones más jóvenes viven en tiempos modernos, con tecnología y conocimientos académicos. Sin embargo, cuando vestimos la indumentaria ceremonial, volvemos al origen de los seres y a la esencia de nuestro linaje".
Como tercer ganador, Manuel ganó equipamiento fotográfico de su elección por un valor de hasta 1.500 CHF.
Segundo puesto: Ummi Garba Hassan, Nigeria
Ummi es una mujer de 26 años del noroeste de Nigeria. Pertenece a la tribu fulani, conocida por ser nómada y estar presente en toda África Occidental. De familia muy tradicional, Ummi participa en la mayoría de los actos culturales que se celebran en su comunidad y fuera de ella.
Ummi se dedica a la fotografía por afición. Sus imágenes muestran historias de personas reales en sus actividades cotidianas. Ummi enseña ciencias en la escuela primaria y le encantaría introducir a sus alumnos en el arte de la fotografía, con la esperanza de que, en el futuro, se convierta en una afición y una profesión para algunos de ellos.
Al describir su fotografía, destacó lo siguiente: "La fiesta de los nómadas, también conocida como Cure Salee, es una reunión de la tribu fula de los clanes tuareg y woodabe. El gerowol es una competición ritual de cortejo entre hombres jóvenes que rivalizan en un concurso de belleza, vistiendo un atuendo regio y adornando sus rostros con pinturas, para intentar llamar la atención de las jóvenes con vistas al matrimonio. Este atuendo es sinónimo del clan woodabe en esta competición".
Como segunda ganadora, Ummi ganó equipamiento fotográfico de su elección por un valor de hasta 2.500 CHF.
Primer puesto: Sindi Yeraldi Ortega Juagibioy, Colombia
Sindi es una kamëntsá biyá de 25 años de Sibundoy, en el departamento de Putumayo, al sur de Colombia. Sibindoy es un pueblo con una gran riqueza cultural que se refleja en formas artísticas como el tejido, la talla, la danza, la música y la literatura oral, entre otras. La profunda conexión de Sindi con su cultura y su pueblo la ha llevado a aprender de sus mayores junto a su colectivo juvenil, Colectivo Ayents, así como a participar en actividades como el tejido tradicional y la siembra, para fortalecer su identidad.
Sindi se sirve de la fotografía para representar a su pueblo. La fotografía que ha presentado a la edición de 2023 del Premio de fotografía de la OMPI representa la resistencia de las mujeres, que usan sus manos y su memoria para preservar la práctica milenaria del tejido, que ha sobrevivido a pesar del impacto de la colonización.
Al describir su fotografía, destacó que para su realización contó con el apoyo y la coordinación de su comunidad y del colectivo de jóvenes. "En el refugio de los Shinyak, mi abuela siempre me cuenta historias y me da consejos. Ella me enseña que este espacio es sagrado para el pueblo kamëntsá, porque cuando nace un bebé, la bejata (placenta) se entierra en su interior con el fin de que el niño reciba fuerza, sabiduría y una conexión inmediata con la tierra, y cuide y proteja nuestra tierra. Por eso nuestro atuendo lleva los colores de la tierra en una de sus prendas más importantes, el Tsombiats (fajín). Es un símbolo de protección y fuerza para el estómago, que lleva inscrito el simbolismo de las vivencias de nuestro pueblo".
Sindi también transmitió un reconocimiento colectivo a quienes la inspiraron a crear esta fotografía "En nombre del colectivo Ayents, quiero expresar nuestro agradecimiento a nuestras familias, así como a las madres, padres, abuelos, líderes, jóvenes y niños de nuestra comunidad que con sus palabras y sentimientos nos han dado la oportunidad de creer en un proceso autónomo y de conciencia de nuestro origen, identidad y territorio como kamëntsá."
Como primera ganadora, Sindi ganó equipamiento fotográfico de su elección por un valor de hasta 3.500 CHF.
Menciones honoríficas del jurado
La edición de este año también ha contado con tres menciones honoríficas, procedentes de Uganda, la República Bolivariana de Venezuela y Colombia, que han compartido valiosas historias sobre sus prendas y la importancia que tienen para sus identidades y comunidades.
Tomemos como ejemplo a Andrew Ayenga, un acholi de Uganda, que compartió un cautivador retrato, titulado La escritura de la vida, de la sonrisa de su abuela luciendo su vibrante kitenge, mientras asume su herencia con orgullo y respeto. Destacó que "los coloridos dibujos y los intrincados diseños de su atuendo tradicional son un testimonio vivo del rico tapiz de su cultura [...] Ella transmite un profundo mensaje: nuestras tradiciones no solo se llevan puestas, sino que se hablan y se celebran, y conectan el pasado, el presente y el futuro".
Asimismo, Oscar Mora Guzmán, un yeral de la República Bolivariana de Venezuela, con su fotografía titulada Entre mis raíces y otros mundos, compartió la historia de su fotografía donde presentaba el viaje de su hermana menor, que se ha embarcado en un nuevo capítulo de la vida donde navega por mundos con realidades diferentes, donde muchas veces no hay referencias a su cultura.
Por último, Isaías Montaño, un kankuamo de Colombia, a través de su fotografía titulada Llevamos puesta a nuestra Madre Tierra: Kukambas compartió la cosmovisión de su comunidad cuando relaciona la ropa con su conexión a la Tierra "Somos aire, agua, fuego y tierra y nuestra ropa representa cada elemento de nuestro entorno. Esta fotografía muestra la representación viva de los pájaros que alegran nuestros días en Sierra Nevada y cuentan nuestro futuro. El atuendo que aparece en la fotografía se utiliza en las danzas de la fiesta del sol".
Ceremonia de entrega de premios en la sede de la OMPI
Tras el anuncio de las 15 excepcionales fotografías finalistas de esta edición, los tres ganadores se dieron a conocer el 2 de noviembre de 2023, durante la ceremonia de entrega de premios celebrada en la sede de la OMPI en Ginebra (Suiza). Para esta ocasión inaugural y por primera vez, se invitó a los ganadores a recibir sus premios en persona. Con sincera gratitud, expresaron su agradecimiento a la OMPI, a sus familias y a sus comunidades, y reconocieron su inestimable apoyo para alcanzar este logro.
El acto contó también con una cautivadora exposición fotográfica, en la que se mostraron no sólo sus extraordinarios trabajos, sino también las notables obras de todos los jóvenes fotógrafos finalistas de Pueblos Indígenas y comunidades locales. A día de hoy, las 15 fotografías finalistas están expuestas en la sede de la OMPI en Ginebra (Suiza).
Además, durante su visita a la OMPI, los ganadores entablaron contacto con la División de Conocimientos Tradicionales, lo que les permitió conocer mejor su labor, además de con especialistas de la División de Derecho de Autor.
Esperamos ser testigos de los futuros esfuerzos creativos de estos talentosos fotógrafos.