13 de marzo de 2023
Las mujeres se enfrentan a lo largo de sus vidas a unos retos únicos, diversos y complejos en materia de salud, entre ellos, las alteraciones asociadas a la menstruación, el embarazo, el posparto, la perimenopausia y la menopausia. Hoy en día, siguen sin cubrirse muchas necesidades específicas relativas a la salud de las mujeres, o se abordan de manera muy superficial. Los persistentes tabúes en torno a la menstruación, el embarazo y la menopausia han hecho que se investigue muy poco al respecto o que estas cuestiones queden relegadas a un segundo plano. No obstante, parece que por fin están cambiando las cosas. En 2021, el New York Times preguntó si la “Femtech“ –herramientas, productos, servicios, dispositivos portátiles y software de diagnóstico que utilizan la tecnología para abordar los problemas de salud reproductiva de las mujeres– era el siguiente gran paso en la atención sanitaria.
Durante mucho tiempo, no se tuvo en cuenta a las mujeres en los ensayos clínicos. Se aborda este tema en un artículo del New York Times de abril de 2021, en el que se cita a Michelle Tempest, socia de la consultoría de asistencia sanitaria Candesic, con sede en Londres:
Uno de los motivos por los que las necesidades de las mujeres no han ocupado un lugar importante en la tecnología es que la investigación en las ciencias de la vida estaba en su inmensa mayoría “adaptada al cuerpo masculino”. En 1977, la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos excluyó a las mujeres en edad de procrear de los ensayos clínicos. Desde entonces, afirma la Dra. Tempest, las mujeres han estado infrarrepresentadas en dichos ensayos debido a la creencia de que las fluctuaciones provocadas por los ciclos menstruales podrían afectar a los resultados, y también porque si una mujer se queda embarazada después de haber tomado un medicamento de ensayo, este podría afectar al feto. En consecuencia, “nos hemos quedado atrás con respecto a los hombres”, indicó.
Esto significa que muchos de los medicamentos y tratamientos que utilizamos hoy en día se han elaborado ajustándose a la biología de los hombres, por lo que pueden afectar al organismo de la mujer de manera diferente. El objetivo de los ensayos clínicos no es únicamente desarrollar un nuevo medicamento y asegurarse de que funciona con el menor daño posible, sino también comprender cómo afecta dicho medicamento al organismo de manera más general. Si no se incluye a las mujeres en los ensayos clínicos, no se podrán comprobar plenamente los efectos de cualquier nuevo medicamento en el organismo.
La enfermedad cardiovascular es un buen ejemplo de lo que puede suceder cuando no se tienen en cuenta las distintas necesidades de los hombres y las mujeres. Al considerarse por lo general un problema que afecta principalmente a los hombres, la investigación relativa a la enfermedad cardiovascular y el desarrollo de los medicamentos correspondientes se ha centrado habitualmente en los hombres.
Cuando las mujeres desarrollan una enfermedad cardiovascular, suelen tener síntomas diferentes a los de los hombres y puede que incluso no sepan que están sufriendo un infarto. De hecho, el tratamiento de una mujer que ha sufrido un ataque al corazón es aún más complejo por el hecho de que, posiblemente, los medicamentos disponibles –desarrollados pensando sobre todo en los hombres– no estén bien adaptados a la biología de una mujer. Por lo tanto, cuando una mujer sufre un ataque al corazón, tiene más posibilidades de morir que un hombre.
Parece que por fin se está prestando más atención a las mujeres y a sus necesidades en la investigación médica y el desarrollo de productos. Esta nueva “revolución sanitaria” se llama Femtech, un término acuñado en 2016 por la cofundadora de Clue –una aplicación sobre la salud menstrual–. La Femtech se refiere a soluciones basadas en la tecnología enfocadas en la salud de las mujeres. Se trata de un mercado amplio y diverso que incluye soluciones relativas a la menstruación, la fertilidad, el embarazo, la maternidad, la salud sexual, la menopausia y la salud de las mujeres en general.
A menudo, la Femtech es desarrollada por mujeres, para mujeres. Por ejemplo, se han creado dispositivos que utilizan teléfonos inteligentes e inteligencia artificial para detectar el cáncer de cuello uterino, tecnologías que brindan apoyo a las personas que han sufrido un cáncer de mama y pulseras inteligentes que notifican a sus portadoras cuándo están ovulando .
La aparición de estas tecnologías es alentadora, pero sigue siendo difícil garantizar que estos productos estén adaptados a todas las mujeres del planeta. En la actualidad, la industria Femtech responde en gran medida a las necesidades de las consumidoras occidentales. El objetivo es, por consiguiente, ampliar el alcance de dicha industria al mayor número posible de mujeres y niñas de las zonas rurales del mundo en desarrollo con el fin de ofrecerles las mismas oportunidades para proteger su salud reproductiva. Afortunadamente, estamos observando la introducción en el mercado local de varias soluciones a medida en diversos contextos. Por ejemplo, Aurat Raaj es una herramienta en línea creada en el Pakistán que proporciona información sobre la higiene menstrual y la salud reproductiva a través de un chatbot en el idioma local.
El potencial sin explotar es enorme; se están celebrando importantes eventos, como la Femtechnology Summit (la Cumbre de Tecnología Femenina), y se está redefiniendo el futuro de la innovación en el ámbito de la salud femenina.
La Femtech podría perfectamente ser la protagonista del futuro de la innovación en el ámbito de la salud para las mujeres. Al fin y al cabo, su mercado destinatario está compuesto por la mitad de la población mundial. Pero, teniendo en cuenta la demanda acumulada a lo largo de décadas e incluso siglos, ¿se está avanzando lo suficientemente rápido?
El sector de la Femtech ha conocido un enorme crecimiento en los últimos años, lo que demuestra que las mujeres esperaban con impaciencia las numerosas soluciones que ofrece. Si bien estas son buenas noticias, en dicho sector siguen existiendo obstáculos y desafíos –entre ellos, actitudes muy arraigadas relativas a la salud de las mujeres –, que frenan los avances.
Estos tabúes tienen repercusiones en la financiación. Se espera que la industria de la Femtech alcance 1,07 billones de dólares de los EE.UU en 2026 . A pesar de este impresionante crecimiento, en 2020 solo se atribuyó el 3% de la financiación destinada a la tecnología sanitaria a empresas dirigidas por mujeres –y tan solo el 0,64% a empresas dirigidas por mujeres de color–. La falta de financiación para las empresas dirigidas por mujeres supone un importante reto para el desarrollo de la Femtech, un movimiento creado “por las mujeres, para las mujeres”.
Además, la Femtech todavía tiene un largo camino por recorrer para abarcar toda la gama de cuestiones relacionadas con la salud de las mujeres. La financiación se centra a menudo en la contracepción, la fertilidad, el embarazo y la maternidad , y se invierte menos en tecnologías relativas a la menstruación, la menopausia, la salud mental y el bienestar sexual. Según un artículo de Swissquote , esto se debe a que, si bien normalmente son las mujeres las que desarrollan la Femtech, los hombres suelen ser los que invierten en esas iniciativas.
Marwan Elfitesse, director de Programas de Empresas Emergentes en Station F, afirma lo siguiente: “Dado que la mayoría de los inversores son hombres, les cuesta ver las oportunidades empresariales que presenta la Femtech más allá de la esfera de la fertilidad –que también implica a los hombres–”.
Claramente, todavía queda mucho por hacer para informar a los inversores en este sector acerca de los beneficios de abordar la salud reproductiva de las mujeres de manera más general, y de las oportunidades comerciales existentes.
¿Hacia dónde se dirige la Femtech? Según Cybernews , gracias al reciente esfuerzo de concienciación con respecto a las cuestiones relativas a la atención sanitaria de las mujeres, en 2023, a medida que el sector vaya ganando terreno, empezaremos a ver más investigación, financiación e inversión dedicadas al desarrollo de tecnologías y productos que aborden el dolor menstrual y la salud general de las mujeres.
¿Cómo podemos garantizar que la tendencia a innovar en la esfera de la salud de las mujeres siga creciendo a más largo plazo? Un buen punto de partida es asegurar que las personas innovadoras del sector de la Femtech tengan unas estrategias de propiedad intelectual (PI) sólidas. Según el podcast Femtech: Innovating for women’s health (Femtech: innovar en la salud de las mujeres), la Femtech es uno de los sectores de más rápido crecimiento en el ámbito de la PI.
Este año, la campaña del Día Mundial de la Propiedad Intelectual se dedicará a las mujeres y la PI . Nuestro objetivo es alentar a un mayor número de mujeres a utilizar el sistema de PI para alcanzar sus objetivos y contribuir a acelerar la innovación y la creatividad, también en el sector de la Femtech. Descubra cómo puede participar en la campaña de este año y qué puede hacer para ayudar a las mujeres a utilizar el sistema de PI.
En el marco de la campaña del Día Mundial de la Propiedad Intelectual 2023, la OMPI presenta la Galería del Día Mundial de la PI, que rinde homenaje a las mujeres innovadoras, creadoras y empresarias de todo el mundo.