Nuevo Récord para el Sistema Internacional de Marcas al Aumentar la Utilización en Más del 20%

Ginebra, 11 de febrero de 2005
Comunicado de prensa PR/2005/402

Ginebra, 15 de febrero de 2005

NUEVO RÉCORD PARA EL SISTEMA INTERNACIONAL DE MARCAS AL AUMENTAR LA UTILIZACIÓN EN MÁS DEL 20%

En 2004 se produjo un nuevo récord en la utilización del sistema de registro internacional de marcas al recibirse 29.459 solicitudes internacionales de registro, lo que supone un aumento del 23,5% en relación con las cifras del año precedente. El sistema de registro internacional de marcas, conocido como el sistema de Madrid, es un servicio rentable y fácil de utilizar, ofrecido por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI), que facilita el proceso de protección de las marcas en varios países.

Por duodécimo año consecutivo, Alemania encabezó la lista de usuarios principales con 5.393 solicitudes internacionales de registro (18,3%), seguida de Francia con 3.503 (11,9%), Italia con 2.499 (8,5%), el Benelux con 2.482 (8,4%) y Suiza con 2.133 (7,2%). En los 12 meses siguientes a la firma del Protocolo de Madrid –uno de los dos tratados que rigen el sistema– los Estados Unidos de América presentaron 1.734 (5,9%) solicitudes internacionales de registro, ocupando el sexto lugar entre los principales usuarios del sistema de Madrid.

En las estadísticas correspondientes a 2004 se observa asimismo un aumento importante del número de solicitudes internacionales de registro procedentes de países como China (+115%), Australia (+100,9%), República de Corea (+86,8%), Bulgaria (+82,5%), Japón (+75,6%), Eslovenia (64,8%), Letonia (62,7%), Hungría (+47,4%), Austria (+36,8%), Turquía (+36,4%), Reino Unido (+36,1%), Italia (+30,5%), Noruega (+29,8%), Eslovaquia (+27,7%), Singapur (+25,7%), República Checa (+24,7%), Suecia (+24,3%), Dinamarca (+17,9%) y Croacia (+15,4%),

“Hemos comenzado a observar aumentos significativos en el uso del sistema desde que los Estados Unidos y la Comunidad Europea son parte en el Protocolo de Madrid. Esta tendencia promete continuar a medida que se difundan más ampliamente las ventajas del sistema y nuevos países se adhieran al mismo”, declaró el Sr. Ernesto Rubio, Subdirector General de la OMPI responsable de las cuestiones relativas a las marcas. Asimismo, el Sr. Rubio observó que la OMPI confía en que a partir de 2004, gracias a la adopción del español como tercer idioma de trabajo en el que los solicitantes pueden presentar solicitudes en virtud del Protocolo de Madrid, se facilitará la adhesión al sistema de Madrid de nuevos miembros de la región de América Latina. Los otros dos idiomas oficiales del sistema son el inglés y el francés.

El sistema internacional de marcas administrado por la OMPI concede a los titulares de marcas la posibilidad de proteger una marca en un total de hasta 76 países a la vez, presentando una sola solicitud redactada en un solo idioma y para la que se abonará una serie de tasas en una única divisa (francos suizos). Posteriormente, el registro se mantiene y se renueva mediante un solo trámite. El registro internacional en virtud del sistema de Madrid surte los mismos efectos que el registro de la marca en cada una de la Partes Contratantes designadas por el solicitante. Si la oficina de marcas de una Parte Contratante designada no deniega la protección, la protección de la marca es la misma que se tendría si se hubiera registrado directamente en dicha oficina. Dicho de otro modo, el sistema ofrece a los titulares de marcas una manera rentable y eficaz de garantizar la protección a sus marcas en varios países mediante la presentación de una sola solicitud.

El sistema se rige por dos tratados internacionales, a saber, el Arreglo de Madrid y el Protocolo de Madrid. En el Protocolo de Madrid, que comenzó a aplicarse en 1996, se introdujeron varias medidas como la posibilidad de presentar solicitudes en inglés y ampliar el plazo otorgado para notificar la denegación de la protección, con las que el sistema ganó en flexibilidad y cobró más interés para un mayor número de países.

En 2004, además de la Comunidad Europea, cuatro países se adhirieron al Protocolo de Madrid, a saber, Croacia, Kirguistán, Namibia y la República Árabe Siria, con lo que asciende a 66 el número de países que son parte en ese Protocolo, y a 77 el de los países miembros del sistema de Madrid.

Entre los 20 primeros usuarios del sistema de Madrid en 2004 figuran los siguientes: Henkel (Alemania), Hofer (Austria), Richter Gedeon (Hungría), Janssen Pharmaceutica (Bélgica), Beiersdorf AG (Alemania), Siemens (Alemania), Novartis (Suiza), Philips Electronics (Países Bajos), Aldi (Alemania), Lidl Stiftung & Co. (Alemania), Deutsche Postbank AG (Alemania), Plus Warenhandelsgesellschaft mbH (Alemania), L'Oréal (Francia), Altana Pharma AG (Alemania), Nestlé (Suiza), Unilever N. V. (Países Bajos), Volkswagen AG (Alemania), Mip Metro Group Intellectual Property GmbH & Co. (Alemania), Akzo Nobel Coatings International BV (Países Bajos), y Merck (Francia).

A finales de 2004 figuraban inscritos en el Registro Internacional unos 424.000 registros internacionales de marcas pertenecientes a 138.280 titulares. Dicha cantidad de registros supone el equivalente a unos 5 millones de registros nacionales, teniendo en cuenta que, por término medio, cada registro internacional surte efecto en unos 12 países designados. El primer registro internacional de marcas data de 1893 y pertenecía al fabricante de chocolate suizo Russ Suchard et Cie, aunque ya ha dejado de estar en vigor. El registro internacional de marcas más antiguo, que sigue vigente como consecuencia de varias renovaciones, pertenece al fabricante de relojes suizo Longines. Se trata de una marca que también fue registrada por primera vez en 1893.

Las marcas son un componente clave de cualquier estrategia fructífera de comercialización. Son indispensables para las empresas a la hora de diseñar sus estrategias comerciales porque les permiten identificar, promocionar y comercializar bajo licencia sus productos y servicios en el mercado, así como distinguirlos de los de sus competidores, con lo que afianzan la fidelidad de sus clientes. Una marca simboliza la promesa de que el producto que la lleva es de calidad, y en el mercado actual, que se extiende a escala mundial y en el que adquieren una presencia cada vez más importante las transacciones electrónicas, a menudo es el único medio por el que los clientes reconocen los productos y servicios de una empresa determinada. Al proteger una marca se impide que los competidores desleales se aprovechen de la buena voluntad de las empresas y utilicen signos distintivos parecidos para comercializar productos o servicios de calidad parecida o inferior. En cambio, si una marca de prestigio se debilita debido a los usos fraudulentos y pierde su valor, las consecuencias pueden ser devastadoras para la empresa.

Para más información, diríjase a la Sección de la OMPI de Relaciones con los Medios de Comunicación y el Público:

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