La OAPI se adhiere al tratado internacional sobre diseños industriales
Los diseñadores africanos han invertido tiempo, energía y pericia en la creación de diseños que se han hecho populares en todo el mundo. (Fotos: OAPI)
El 16 de junio la Organización Africana de la Propiedad Intelectual (OAPI) depositó su instrumento de adhesión la Acta de Ginebra del Arreglo de La Haya relativo al Registro Internacional de los Dibujos o Modelos Industriales. El Acta de Ginebra es uno de los tres instrumentos que rigen el Sistema de La Haya de registro internacional de diseños industriales, que ofrece a las empresas de todos los países que lo integran una manera simple, asequible y eficiente de proteger y mantener sus carteras de diseños industriales.
El instrumento de adhesión de la OAPI, depositado por el Director General de la Organización, el Dr. Edou Edou, entrará en vigor el 16 de septiembre. “La participación de la OAPI en este sistema no sólo agilizará la protección de las creaciones extranjeras en el territorio de nuestros Estados miembros,” explica el Dr. Edou Edou, “ante todo, pondrá al alcance de nuestros creadores, económicamente más débiles, las facilidades que este Sistema ofrece para protegerse de los abusos de los que suelen ser víctimas y cosechar el fruto de su trabajo de creación, como corresponde.”
En 2007 la OAPI registró cerca de 149 de esos diseños, que abarcan desde calzado hasta tejidos como éste, obra de John Walkden et Cie S.A., una empresa beninesa.
La OAPI agrupa 16 Estados, a saber: Benin, Burkina Faso, Camerún, Chad, Congo, Côte d’’Ivoire, Gabón, Guinea, Guinea Bissau, Guinea Ecuatorial, Malí, Mauritania, Níger, República Centroafricana, Senegal y Togo. El Dr. Edou Edou añade: “Estos países sólo representan una porción muy pequeña del volumen de comercio internacional. El Sistema de La Haya da a sus creadores y empresarios la posibilidad de extender la protección de sus creaciones en el exterior sin necesidad de someterse a innumerables requisitos, abaratando además los trámites”.
Pie de foto: Los diseñadores africanos han invertido tiempo, energía y pericia en la creación de diseños que se han hecho populares en todo el mundo. En 2007 la OAPI registró cerca de 149 de esos diseños, que abarcan desde calzado hasta tejidos como éste, obra de John Walkden et Cie S.A., una empresa beninesa.
La forja de una nueva misión
Bajo la dirección del Dr. Edou Edou, la OAPI se está forjando una nueva misión, y en esa tarea la adhesión al Sistema de La Haya es sólo el comienzo. El Dr. Edou Edou, que fue elegido Director General en agosto de 2007, proyecta una Organización que “sea un laboratorio de análisis capaz de hacer frente a las cuestiones más difíciles y complejas en materia de desarrollo y P.I.” Su objetivo es modernizar la OAPI para hacer de ella el catalizador del crecimiento futuro de sus Estados miembros: una función imprescindible que se define en el mandato de la Organización.
Los estudios realizados por la OAPI demuestran que en la mayoría de sus Estados miembros los investigadores científicos no tienen en cuenta la P.I. en relación con su labor y, menos aún, en relación con la creación de empresas. Lo mismo sucede con los promotores de empresas, que no recurren a la P.I. como instrumento empresarial ni muestran interés por la investigación institucional. Los investigadores, las empresas y la P.I. parecen existir en mundos diferentes, en lugar de ser pilares complementarios que cooperen armónicamente en beneficio del desarrollo económico del país.
La OAPI se ha impuesto el reto de llevar la P.I. al mercado en los próximos cinco años. La Organización quiere promover la explotación de la P.I. y tender un puente sobre el abismo económico que impide llevarla. al mercado o transformarla en un activo económico. Las soluciones ya se han identificado. Ahora la OAPI trata de determinar cuáles son las más adecuadas a sus circunstancias y su entorno a fin de utilizarlas para transformar los títulos de P.I. en activos de P.I.
Enlaces
El propósito de OMPI Revista es fomentar los conocimientos del público respecto de la propiedad intelectual y la labor que realiza la OMPI, y no constituye un documento oficial de la Organización. Las denominaciones empleadas en esta publicación y la forma en que aparecen presentados los datos que contiene no entrañan, de parte de la OMPI, juicio alguno sobre la condición jurídica de ninguno de los países, territorios o zonas citados o de sus autoridades, ni respecto de la delimitación de sus fronteras o límites. La presente publicación no refleja el punto de vista de los Estados miembros ni el de la Secretaría de la OMPI. Cualquier mención de empresas o productos concretos no implica en ningún caso que la OMPI los apruebe o recomiende con respecto a otros de naturaleza similar que no se mencionen.