Las TIC y la innovación: Opinión de una de las empresas que presenta más solicitudes PCT
Por Ken Hu, Director Ejecutivo en funciones y Presidente Adjunto de Huawei
A principios del siglo pasado, el economista austríaco Joseph Alois Schumpeter señaló que “la función del empresario es la innovación”, una opinión que siguen sosteniendo muchas personas hoy en día. En Huawei, creemos firmemente que tenemos la responsabilidad y la capacidad de contribuir al crecimiento económico y el progreso social mediante la innovación constante.
Actualmente, la apertura y la cooperación son dos características cruciales que impulsan la innovación. Las empresas necesitan obtener capacidad intelectual a escala mundial, logrando el éxito a través de la cooperación con los participantes de la cadena de valor mundial. La innovación colectiva depende de un entorno institucional que sustente, proteja y estimule la innovación constantemente. Los elementos de ese entorno incluyen:
En primer lugar, los mercados que alientan las prácticas de comercio libre y equitativo y promueven la competencia. Esos son los verdaderos motores de innovación que impulsarán el desarrollo industrial y social.
Dos factores fundamentales han contribuido al rápido desarrollo económico observado en los 200 últimos años: el primero es el avance de las tecnologías, que aumentaron considerablemente la productividad, y el segundo, el establecimiento del libre comercio que facilitó la redistribución mundial de los recursos y la reestructuración industrial, maximizando la utilización de las innovaciones científicas y tecnológicas. El crecimiento económico exponencial de China en los tres últimos decenios también es atribuible a esos dos factores. Huawei, en particular, es profundamente consciente de la importancia que reviste la apertura (mercado abierto y prácticas de libre comercio siguen siendo lo que impulsa principalmente el crecimiento económico mundial), ya que trabajamos en el sector de la tecnología de la información y las comunicaciones (TIC). Al repasar la historia de la tecnología de las comunicaciones, se observa que un sistema abierto siempre atrae más apoyo sectorial y logra mayores éxitos que uno cerrado. A modo de ejemplo, se pueden citar el caso del éxito del Sistema Global de Comunicaciones Móviles (GSM) en el pasado y las redes de evolución a largo plazo (LTE) de la actualidad. Un enfoque cerrado tiende a un éxito limitado y, a menudo, al retiro definitivo del mercado.
En segundo lugar, debe instaurarse un sistema eficaz para proteger los derechos de P.I. antes de que surja la verdadera innovación.
Proteger los derechos de P.I. significa salvaguardar la innovación. La innovación científica y tecnológica requiere inversiones considerables en tiempo, fondos y capacidad intelectual. Los innovadores que tengan éxito deberían poseer los derechos de P.I. de los resultados de su labor innovadora y beneficiarse de las recompensas conexas. Se puede motivar a las empresas y las personas para que prosigan la actividad innovadora e inviertan más en este campo si sus resultados se protegen apropiadamente. Han pasado más de trescientos años desde que se creó el primer sistema de protección de derechos de P.I. en el mundo. Pese a estar rezagada, China ha avanzado notablemente en el desarrollo de sus sistemas de protección de derechos de P.I. en los tres últimos decenios. Ese es uno de los motivos principales por los que cada vez más empresas innovadoras aparecen en China.
En tercer lugar, las innovaciones dependen de las inversiones a largo plazo en infraestructura.
La inversión en educación aporta los recursos intelectuales para la investigación innovadora. La construcción de infraestructura, especialmente infraestructura de TIC, ofrece soporte físico que respalda las plataformas para la innovación.
Acerca del Índice Mundial de Innovación
La Universidad Cornell, el INSEAD y la OMPI han publicado conjuntamente el Índice Mundial de Innovación 2013, en su sexto año consecutivo, con el apoyo de los socios especializados Booz & Company, la Confederación de la Industria India, du, y Huawei Technologies. El Índice de 2013 compara el desempeño en materia de innovación de 142 países que representan aproximadamente el 95% de la población mundial y casi el 99% del PIB mundial. Utilizando 84 indicadores relativos a la calidad de las principales universidades, la disponibilidad de microfinanciación y los acuerdos de capital de riesgo, evalúa las capacidades y los resultados ponderables en el ámbito de la innovación.
El compromiso de Huawei con la innovación
El crecimiento de Huawei puede atribuirse a nuestro deseo de competir en los mercados internacionales y, lo que es más importante, a nuestras estrategias de innovación centradas en el cliente. La satisfacción de las necesidades de los clientes es el punto de partida de nuestros esfuerzos innovadores y refleja el valor de nuestras innovaciones. A nuestro entender, la innovación debe estar en el centro de nuestra estrategia operativa. Al aprovechar los mecanismos óptimos de innovación, Huawei desarrolla constantemente ventajas y capacidades tecnológicas orientadas al futuro para satisfacer mejor las necesidades de los clientes en plazos más cortos y a costos inferiores. Nuestro enfoque se centra en 5 esferas principales:
- Inversión permanente en investigación y desarrollo (I+D): Cada año desde la fundación de Huawei en 1997, hemos invertido el 10% de nuestros ingresos anuales en I+D. De nuestros 150.000 empleados, más de 70.000 participan directamente en actividades de I+D. En 2012, nuestra inversión en I+D llegó a un total de 4.800 millones de dólares EE.UU., y la cifra correspondiente al decenio pasado asciende a 19.000 millones de dólares EE.UU. Nuestra inversión en I+D es un compromiso a largo plazo que perdurará.
- Atención especial a las innovaciones tecnológicas fundamentales: Huawei divide las innovaciones en tres categorías: innovaciones en aplicaciones, innovaciones en productos e innovaciones tecnológicas fundamentales. Lo que es importante para nosotros no solo es centrarnos en las innovaciones en aplicaciones y productos que los clientes pueden ver y comprobar en la práctica, sino también prestar atención especial a las innovaciones tecnológicas fundamentales, que, a nuestro juicio, son cruciales para el éxito de las otras dos categorías de innovaciones aunque no suelan ser observables.
- Integración de los recursos intelectuales a escala mundial: Nuestro mundo se caracteriza por la abundancia de información, y la globalización económica y tecnológica está avanzando constantemente. En ese contexto, debemos centrarnos en nuestras cuantiosas inversiones de I+D destinadas a integrar los recursos a nivel mundial con la mayor eficiencia posible. Huawei ha establecido 16 centros independientes de I+D en el mundo, que se extienden sobre América del Norte, Europa, y Asia y el Pacífico. Ello permite a Huawei integrar los mejores recursos intelectuales del mundo y desarrollar capacidades de innovación a nivel global.
- Disposición permanente a cooperar con entidades internacionales: En la era globalizada, no cabe duda de la importancia de la apertura y la cooperación para la innovación. En términos de I+D, Huawei participa en iniciativas de cooperación en varios niveles. Cooperamos con entidades de nuestro sector, con organizaciones como IBM, Intel, así como con gobiernos y clientes en distintos países.
Nuestra estrategia de I+D da la máxima prioridad a los clientes, dado que sus necesidades son las que orientarán nuestras futuras innovaciones tecnológicas. La innovación conjunta con los clientes también constituye una parte importante del compromiso de Huawei con la apertura y la cooperación. Hasta la fecha, Huawei ha establecido más de 20 centros de innovación conjunta con los clientes en el mundo, que ya han aportado un valor sustancial. - Respeto y protección de los resultados innovadores: Huawei desempeña un papel activo en la protección de los derechos de P.I. en el sector. Respetamos los derechos de P.I. de las empresas de nuestro sector y los utilizamos mediante la concesión recíproca de licencias y el pago de tasas para acelerar el desarrollo de nuevas innovaciones. Asimismo, adoptamos toda medida jurídica necesaria para proteger nuestros propios derechos de P.I. Hasta la fecha, Huawei ha presentado más de 40.000 solicitudes de patente en China y unas 30.000 solicitudes internacionales y nacionales en otros países. Utilizamos el Tratado de Cooperación en materia de Patentes (PCT) administrado por la OMPI, que nos ofrece una gran flexibilidad, nos permite ahorrar tiempo y dinero y nos ayuda a tomar las decisiones adecuadas en relación con nuestra estrategia de obtención de patentes. A Huawei se le han concedido más de 30.000 patentes en el mundo. Además, Huawei paga anualmente alrededor de 300 millones de dólares EE.UU. en concepto de tasas por la concesión de licencias a los socios sectoriales.
De cara al futuro
Actualmente, la innovación forma parte integrante de nuestra vida cotidiana. De cara al futuro, la mayor integración del mundo digital y el físico marcará el comienzo de nuevas tendencias de desarrollo digital. Huawei ha asumido el compromiso de proporcionar canales de información más amplios y ágiles en una sociedad cada vez más digital, facilitando así las conexiones omnipresentes de banda ancha. Seguiremos siendo flexibles e innovadores de manera que contribuyamos al Índice mundial de innovación y cooperemos con la OMPI y otras partes interesadas para ayudar a establecer un entorno favorable de innovación y promover conjuntamente la innovación científica y tecnológica en beneficio de la sociedad.
El propósito de OMPI Revista es fomentar los conocimientos del público respecto de la propiedad intelectual y la labor que realiza la OMPI, y no constituye un documento oficial de la Organización. Las denominaciones empleadas en esta publicación y la forma en que aparecen presentados los datos que contiene no entrañan, de parte de la OMPI, juicio alguno sobre la condición jurídica de ninguno de los países, territorios o zonas citados o de sus autoridades, ni respecto de la delimitación de sus fronteras o límites. La presente publicación no refleja el punto de vista de los Estados miembros ni el de la Secretaría de la OMPI. Cualquier mención de empresas o productos concretos no implica en ningún caso que la OMPI los apruebe o recomiende con respecto a otros de naturaleza similar que no se mencionen.