Fundada en 2015, Qingdao Aibo Detection Technology Co., Ltd. es una empresa de fabricación de productos médicos con sede en Qingdao, China. El objetivo inicial de Aibo era fabricar reactivos para pruebas, pero a medida que la empresa fue creciendo, también lo hizo su ámbito de actividades. Ahora ya también fabrica y vende dispositivos médicos, productos para realizar pruebas biológicas, productos de caucho y plástico y reactivos de diagnóstico in vitro.
El fundador de Aibo, Zhibo Yao, ingeniero especializado en pruebas médicas, se dio cuenta de que el mercado de las pruebas médicas estaba creciendo rápidamente. "Me di cuenta de que en poco tiempo podía llegar lejos fabricando reactivos para pruebas. Por desgracia, otros muchos habían tenido la misma idea", añade. En los comienzos, Aibo y sus 12 empleados sabían muy poco de protección de la propiedad intelectual (PI) y, por ello, la empresa no tenía ningún activo de PI a su nombre. Después fue dándose cuenta poco a poco del papel fundamental que podían tener la innovación y la propiedad intelectual en el futuro de la empresa, y cambió de enfoque para dedicarse a la investigación y el desarrollo (I+D).
"Después de asistir a varios cursos impartidos por nuestra oficina local de PI entendí que con las patentes, mis productos podrían diferenciarse de los de los competidores que querían lanzar productos similares”.
Con el tiempo creamos dos invenciones relacionadas con las pruebas médicas y solicitamos su protección por patente en 2017", explica el Sr. Yao. Aunque Aibo había apostado por la innovación y el desarrollo, la empresa tenía pocos fondos, y eso dificultaba su avance. "Los gastos de I+D casi nos desangran", sobre todo teniendo en cuenta que nuestra empresa tenía solo 12 personas y apenas ingresos", explica el Sr. Yao.
Como muchas otras pymes, Aibo entró en el mercado con una baja calificación de solvencia y pocos activos. En 2019, los problemas de liquidez obstaculizaron gravemente el desarrollo de la empresa, obligándola a buscar ayuda en distintos lugares. Fue entonces cuando el Sr. Yao obtuvo información sobre el Centro de Servicios Públicos de Propiedad Intelectual de Qingdao, que se estaba preparando para convertirse en un centro de la OMPI de apoyo a la tecnología y la innovación (CATI) en China.
Una vez gastados todos mis ahorros y agotadas las posibilidades de pedir préstamos a amigos y bancos, y a punto de cerrar el negocio, me enteré de que el centro de servicios de PI del gobierno local ayudaba a las pymes a obtener préstamos bancarios ofreciendo patentes como garantía", dice el Sr. Yao.
"Aunque al principio tenía reservas, visité el centro. Evaluaron mi empresa y me ayudaron en todos los trámites para solicitar un préstamo. Para mi gran sorpresa, y en solo un mes, el Banco de Qingdao nos concedió un préstamo de 3 millones de yuanes (unos 460.000 dólares)". Esta inyección de capital impulsó la confianza de la empresa en la inversión en innovación y desarrollo, lo que dio lugar a posteriores mejoras de los productos.
Aibo aprovechó al máximo los servicios y recursos de propiedad intelectual proporcionados por el CATI local. La empresa envió a su personal a participar en cursos de formación del CATI acerca del uso de la información sobre patentes e hizo uso de las bases de datos sobre patentes del centro, que son gratuitas, para apoyar el desarrollo de sus productos y la planificación de su cartera de patentes.
Al formar parte del programa de CATI de la OMPI, hemos podido aprovechar al máximo los recursos del centro, y eso nos ha permitido tomar decisiones más acertadas a la hora de utilizar el sistema de patentes", señala el Sr. Yao. El acceso a un CATI local ha ayudado a mejorar las habilidades de PI del equipo de Aibo y la calidad de sus productos.
En 2019, Aibo presentó 16 solicitudes de patente para sus tecnologías esenciales y finalizó la planificación preliminar de su cartera de patentes.
Durante la pandemia de COVID-19 en 2020, Aibo conoció a otros usuarios de los servicios del CATI y, por medio de ellos, pudo ampliar su base de clientes. "Como parte de la red de CATI, tuvimos la oportunidad de conocer a otros usuarios del sistema, en particular a los que están estrechamente relacionados con nuestro ámbito de actividad. Actualmente se necesitan suministros médicos en todas partes, y hemos podido establecer contacto con varios clientes nuevos a través de la red". Como empresa que ahora cuenta con una plantilla de 70 personas, Aibo tiene 13 solicitudes de patente pendientes (todas ellas de modelos de utilidad) y ha obtenido 31 patentes (8 invenciones, 23 modelos de utilidad). De 2017 a 2020, sus ingresos de explotación pasaron de 1.589,700 yuanes (unos 244.000 dólares EE.UU.) a 13.620.000 yuanes (unos 2.100,000 de dólares EE.UU.). También han entablado conversaciones con inversores de capital riesgo para crecer más rápidamente en el dinámico mercado de los suministros médicos.
Aibo, que en su día era una empresa emergente sin ningún título de propiedad intelectual, ahora tiene su propio equipo y sistema de gestión de la propiedad intelectual. En cinco años, la empresa ha crecido de forma considerable, gracias a su comprensión de la PI, su compromiso con la innovación y los servicios especializados que ofrece su CATI. En ese período, la propiedad intelectual se ha convertido en un elemento central del modelo de negocios de Aibo y está impulsando su desarrollo. "Estamos consiguiendo más patentes, lo que nos permitirá obtener más préstamos, nos ayudará a fabricar mejores productos y a comercializarlos de forma más eficaz. Este círculo virtuoso no tiene fin, y eso es muy alentador", dice el Sr. Yao.
Como pyme del sector tecnológico, Aibo se enfrentó a un problema que es muy común entre las empresas emergentes: la dificultad para acceder a la financiación. Los CATI pueden apoyar a las empresas a financiar los activos de PI, a la formación en PI, a la búsqueda y el análisis en materia de patentes, la gestión de la PI y otros servicios de apoyo a la innovación. Con el acceso a esos servicios, Aibo ha podido crecer y gracias a su mayor comprensión de la PI, está mejorando su capacidad de innovación y hace amplio uso de la PI para apoyar sus objetivos empresariales. Al aprovechar los activos intangibles para obtener acceso al capital necesario, Aibo ha logrado un desarrollo sólido y sostenido y se ha convertido en un modelo a seguir en el desarrollo innovador de las pymes.