Las soluciones ecoinnovadoras en el sector de la agricultura son cruciales para garantizar la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas de esta actividad en todo el mundo, y para facilitar a los agricultores métodos de producción sostenibles y rentables. Entender esto es fundamental para la labor de Biodôme du Maroc, una pequeña empresa marroquí de rápido crecimiento que facilita a los agricultores locales una tecnología con la que pueden acceder a una energía renovable y usarla en sus explotaciones agrícolas.
Fundada en 2013 por la Dra. Fátima Zahra Beraich, Biodôme du Maroc es la primera empresa marroquí especializada en la recolección de residuos orgánicos mediante tratamientos naturales y procesos respetuosos con el medio ambiente.
Tras finalizar su tesis doctoral sobre digestión anaeróbica en la Universidad Hassan I de Settat, la Dra. Fátima Zahra Beraich se inscribió en un programa de desarrollo empresarial ofertado por la universidad, el cual culminó en la creación de Biodôme du Maroc.
La Dra. Beraich es un ejemplo inspirador de innovación, espíritu emprendedor y perseverancia en un sector dominado históricamente por los hombres. Ha recibido numerosos premios, entre otros, el de Mejor Emprendedora del Programa Mundial de Innovación en Tecnologías Limpias (GCIP, por sus siglas en inglés) de 2016 en Marruecos, y el Premio Tamayuz para Mujeres Marroquíes en 2017, el cual celebra los logros de las mujeres emprendedoras de Marruecos.
La Dra. Beraich fundó Biodôme du Maroc porque quería desarrollar un método para recolectar y tratar residuos agrícolas de manera ecológica, a fin de que los agricultores de las zonas rurales pudieran producir biogás y fertilizantes.
En las zonas rurales de Marruecos, el gas propano embotellado —en absoluto la opción más sostenible— supone la principal fuente de energía para cocinar, limpiar y bombear agua. Con su invento, la Dra. Beraich permite a los agricultores acceder a una fuente de energía más sostenible a partir de sus residuos agrícolas, los cuales pueden utilizarse para producir biogás y fertilizantes de alta calidad.
“Pensé, ¿por qué no sustituir las bombonas de gas propano por un sistema que básicamente existe y que solo hay que modernizar para hacerlo viable y sostenible a largo plazo?”, dice la Dra. Beraich.
El biogás y el compost de alta calidad que se produce mediante la descomposición de la materia orgánica tienen numerosos beneficios para los agricultores y el medio ambiente.
Para los agricultores, la capacidad de producir gas a partir de residuos orgánicos la convierte en una atractiva fuente de energía renovable de bajo costo. La biodigestión también produce abono orgánico de elevada calidad que los agricultores pueden utilizar para mejorar el rendimiento de los cultivos, reducir costos y ampliar los márgenes de beneficio.
En lo que respecta al medio ambiente, el biogás contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero procedentes de residuos orgánicos abandonados y reduce el riesgo de contaminación de los cursos de agua. Este método “limpio” de producción de energía también reduce la dependencia de la madera como fuente de combustible.
Biodôme du Maroc ofrece una amplia gama de digestores anaeróbicos agrícolas de pequeña escala, entre otros:
Los digestores de Biodôme utilizan un sistema sencillo e innovador para producir biogás y recolectar materia orgánica. En el interior de una cámara subterránea de hormigón, los agricultores pueden depositar diferentes tipos de residuos orgánicos, por ejemplo, domésticos, vegetales y animales, que se fermentan en un acelerador biológico. En este proceso, se produce gas por metanización o biodigestión anaeróbica, en la que las bacterias descomponen de forma natural la materia orgánica en cuestión de semanas. La tecnología es barata y fácil de usar, y ofrece a los agricultores un suministro de energía independiente y sostenible en forma de biogás y un flujo de fertilizantes orgánicos de bajo costo.
Actualmente la Dra. Beraich es titular de seis patentes que abarcan innovaciones para la mejora de la eficiencia y el rendimiento de los biodigestores de Biodôme.
Las patentes de Biodôme son activos indispensables. Reflejan nuestro compromiso con la investigación y el desarrollo y refuerzan nuestra reputación como proveedor de soluciones innovadoras que satisfacen las necesidades de nuestros clientes,
afirma la Dra. Beraich.
“El proceso de obtención de una patente implica que nuestra tecnología es evaluada por especialistas y nos permite comprender lo diferentes que son nuestras invenciones de otras tecnologías de la competencia. Gracias a este hecho podemos proteger las características inventivas de nuestros productos”, explica. “Con estas patentes en nuestro haber, esperamos poder conceder licencias sobre nuestras innovaciones patentadas más recientes”.
El apoyo de la Asociación Marroquí Investigación y Desarrollo (I+D Maroc) —que forma parte de la red de centros de apoyo a la tecnología y la innovación (CATI) de Marruecos— ha desempeñado un papel fundamental en el éxito de Biodôme du Maroc. “Conocí la red CATI en un acto de divulgación en la universidad organizado por la Oficina de Propiedad Industrial y Comercial de Marruecos”, explica la Dra. Beraich. “A través de estas iniciativas, muchos profesionales de la investigación y jóvenes inventores han comprendido mejor lo que supone el procedimiento de solicitud de protección por patente y se han beneficiado del asesoramiento de especialistas a lo largo del proceso.”
R&D Maroc ayudó a la Dra. Beraich a conseguir la financiación inicial y también se aseguró de que contara con la ayuda necesaria para redactar sus solicitudes de patente, conceder licencias y acceder a la tecnología que necesitaba para crear y comercializar sus biodigestores.
Biodôme comercializa sus biodigestores, protegidos por patente, en Marruecos y en toda África. “Nuestro equipo de investigación busca continuamente formas de desarrollar nuevas soluciones tecnológicas para su futura comercialización”, explica la Dra. Beraich.